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Ejemplos de oraciones con la palabra arquitectura

Lista de frases en las cuales se puede ver cómo se usa la palabra arquitectura en el contexto de una oración.

Término arquitectura: Frases

Si quieres ver ejemplos de uso de la palabra "arquitectura" aquí tienes una selección de 19 frases y oraciones donde se puede ver su aplicación en un texto.

En cada una de las frases aparece resaltada la palabra arquitectura para que la puedas detectar fácilmente.

Para evitar saturar nuestro sistema sólo se mostrarán un máximo de 100 frases por palabra.

  • En arquitectura le preocupaban mucho las proporciones.
  • Él pensaba que aludía a lo de la arquitectura y se hacía el distraído.
  • A Barbarita le daba aquella noche por hablar de arquitectura y no perdía ripio.
  • Era uno de esos palacios grandones y sin arquitectura, construidos por la nobleza.
  • Con emplastos de cal y sinapismos de barro parecía un inválido de la arquitectura.
  • Han visto ustedes el panteón, de severa arquitectura románica, sublime en su desnudez.
  • Allí la puerta de Toledo ¡qué soberbia arquitectura! A la otra parte la fábrica del gas.
  • En el patio de la Escuela de Arquitectura, grupos de estudiantes esperaban a que se abriera la clase.
  • Todas las líneas horizontales de la arquitectura y el herraje de los balcones perfilados con purísimas líneas de nieve.
  • Había oído en hora y media un curso peripatético ¡a pie y andando todo el tiempo! de arqueología y arquitectura y otro curso de historia pragmática.
  • Dios era no menos amable como Padre de las criaturas, como Director de la gran fábrica de la inmensa arquitectura, que en la pura contemplación de su Idea.
  • La música era digna de la arquitectura, y sonaba a zarzuela sentimental o a canción de las que se reparten como regalo a las suscritoras en los periódicos de modas.
  • Pero no pueden, porque delata la relativa juventud de estos caserones su arquitectura que revela el mal gusto decadente, pesado o recargado, de muy posteriores siglos.
  • Por una de estas anomalías clásicas de España, aquellos estudiantes que esperaban en el patio de la Escuela de Arquitectura, no eran arquitectos del porvenir, sino futuros médicos y farmacéuticos.
  • La clase de Química general del año preparatorio de Medicina y Farmacia se daba en esta época en una antigua capilla del Instituto de San Isidro convertida en clase, y ésta tenía su entrada por la Escuela de Arquitectura.
  • Pasaron allí creo que ocho o diez días, encantados, sin aburrirse ni un solo momento, viendo los portentos de la arquitectura y de la Naturaleza, participando del buen humor que allí se respira con el aire y se recoge de las miradas de los transeúntes.
  • Y en el centro de la mesa el ramillete de casa Burriel, arquitectura de turrón, y merengue que afectaba la forma de un castillo surgiendo de un montón de flores y rematado por una bailarina que, montada sobre un alambre, danzaba temblorosa sobre la obra maestra de confitería.
  • La torre de la catedral, poema romántico de piedra, delicado himno, de dulces líneas de belleza muda y perenne, era obra del siglo diez y seis, aunque antes comenzada, de estilo gótico, pero, cabe decir, moderado por un instinto de prudencia y armonía que modificaba las vulgares exageraciones de esta arquitectura.
  • XIV Era el Espolón un paseo estrecho, sin árboles, abrigado de los vientos del Nordeste, que son los más fríos en Vetusta, por una muralla no muy alta, pero gruesa y bien conservada, a cuyos extremos ostentaban su arquitectura achaparrada sendas fuentes monumentales de piedra obscura, revelando su origen en el ablativo absoluto Rege Carolo III, grabado en medio de cada mole como por obra del agua resbalando por la caliza años y más años.