Palabras

Ejemplos de oraciones con la palabra empecé

Lista de frases en las cuales se puede ver cómo se usa la palabra empecé en el contexto de una oración.

Término empecé: Frases

Si quieres ver ejemplos de uso de la palabra "empecé" aquí tienes una selección de 18 frases y oraciones donde se puede ver su aplicación en un texto.

En cada una de las frases aparece resaltada la palabra empecé para que la puedas detectar fácilmente.

Para evitar saturar nuestro sistema sólo se mostrarán un máximo de 100 frases por palabra.

  • Por ahí empecé yo.
  • Y con esto empecé a llorar.
  • Yo empecé a ver la cosa mal.
  • Yo empecé a sentirme como en un sueño.
  • Salió, espetéme en el dicho y empecé mi jornada.
  • Y gracias que llevaba pantalones y empecé a chillar.
  • Empecé a hablar muy recio de las cañas de Talavera y de un caballo que tenía porcelana.
  • ¡Ay! ¡Dios se lo perdone, que me ha pisado! Oyéronme esto y en llegando, empecé a decir.
  • Yo le prometí de hacerlo, tornóse a partir de mí, y yo empecé a reírme del secreto tan gracioso.
  • Ana sintió brasas en las mejillas empecé a engordar, a comer bien y me puse como un rollo de manteca.
  • Yo que me vi así, y rodeado de niños que se habían llegado, y delante de mi señora, empecé a decir.
  • Llegamos al Prado, y en entrando, saqué el pie del estribo y puse el talón por defuera y empecé a pasear.
  • Padillita le metió un día en la botica, y yo empecé a darle guasa con sus críticas, diciéndole que me gustaban mucho.
  • Yo empecé luego, para trabar conversación, a jugar del vocablo, de tercio y pelado y pelo y apelo y pospelo, y no dejé hueso sano a la razón.
  • Y así, empecé mi jornada, saliendo de casa con los otros, aunque por ser nuevo me dieron, para empezar la estafa, como a misacantano, por padrino el mismo que me trujo y convirtió.
  • Fuime derecho a la iglesia, recé, y luego empecé a repasar todos los lazos y agujeros de la red con los ojos para ver si parecía, cuando Dios y enhorabuena, que más era diablo y en hora mala, oigo la seña antigua.
  • Yo, como iba cargado, vi que aunque les llevaba ventaja, me habían de alcanzar, y al volver una esquina, sentéme sobre él y envolví la capa a la pierna de presto y empecé a decir, con la pierna en la mano, fingiéndome pobre.
  • Que cuando me empezaron a tirar los tronchos, nabos, etcétera, que, como yo llevaba plumas en el sombrero, entendiendo que me habían tenido por mi madre y que la tiraban, como habían hecho otras veces, como necio y muchacho, empecé a decir.