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Ejemplos de oraciones con la palabra enferma

Lista de frases en las cuales se puede ver cómo se usa la palabra enferma en el contexto de una oración.

Término enferma: Frases

Si quieres ver ejemplos de uso de la palabra "enferma" aquí tienes una selección de 100 frases y oraciones donde se puede ver su aplicación en un texto.

En cada una de las frases aparece resaltada la palabra enferma para que la puedas detectar fácilmente.

Para evitar saturar nuestro sistema sólo se mostrarán un máximo de 100 frases por palabra.

  • Estoy enferma.
  • ¿Estás enferma?
  • Yo estoy enferma.
  • Enferma, ¿de qué?
  • Luego está enferma.
  • Creyolo así la enferma.
  • La mujer estaba enferma.
  • Hacía muy buena enferma.
  • Andrés examinó a la enferma.
  • Se ponía enferma de vergüenza.
  • La pobre enferma se desvaneció.
  • Sin embargo, usted está enferma.
  • A la enferma la visitaba Sánchez.
  • La hija del molinero estaba enferma.
  • La señora de Tal ha estado enferma.
  • ¿Y qué tal se ha portado la enferma?
  • Ya no tenía compasión de la enferma.
  • Aviada está la enferma con las vecinas.
  • Toda alma que viene aquí está enferma.
  • Andrés volvió a reconocer a la enferma.
  • Como si preguntara ¿cómo va la enferma?
  • Doña Ana, amigo mío, no estaba enferma.
  • La pobre niña enferma fué recobrando vida.
  • ¡Está enferma! Y un susto, un susto grande.
  • La enferma miraba angustiada esta persecución.
  • También ha estado enferma, pero ya se levanta.
  • Doña Camila estaba enferma del susto, en cama.
  • ¡Está enferma! Sí, más de lo que tú crees.
  • Debe estar enferma del estómago dijo tu abuela.
  • La niña está muy enferma, y no por culpa suya.
  • La Marquesa estuvo poco tiempo junto a su amiga enferma.
  • Un día, una de estas mujeres se siente un poco enferma.
  • Tras ellas, la pobre mujer, enferma, temblando de fiebre.
  • ¡Ahora, ánimo, y a otra! La enferma sonrió tristemente.
  • Ana estaba ya enferma cuando la sobrecogió la catástrofe.
  • El infeliz tiene que mantener a su madre, que está enferma.
  • Se le despejó la cabeza, y se dispuso a cuidar a la enferma.
  • Menos ser como todas esas ! Y a los pocos días cayó enferma.
  • Diré a tu marido que Benigna está enferma y has ido a visitarla.
  • Dieron un vistazo y un apretón de manos a la enferma, y salieron.
  • La enferma, que ya andaba poco, acaba por no moverse de su asiento.
  • Me han llamado aquí para ver a una enferma dijo Andrés fríamente.
  • Cuando la fundadora entró, la enferma continuaba en el mismo estado.
  • La tripulación, enferma de vómito negro, tenía un aire lamentable.
  • Un año, próximamente, después de casados, Lulú se puso algo enferma.
  • La Shele había tenido un hijo fuerte, robusto, pero ella estaba enferma.
  • Así pasan dos o tres meses, y se va viendo que la enferma va empeorando.
  • Cállese usted le dijo Andrés, si quiere usted que reconozca a la enferma.
  • Y había sentido miedo y estuvo tentada a fingirse enferma para volver a casa.
  • Por eso digo que debo de estar enferma, cuando me persiguen visiones y vestiglos.
  • Yo estaba enferma, y Juárez me dijo que si me iba con él, me llevaría a baños.
  • X Aquella noche, cuando Maxi subió a comer, encontró a su mujer un poco enferma.
  • Entre tanto, la de Rubín estaba sola con la enferma, porque Severiana se fue a la cocina.
  • Ni la pobre enferma podía oír lo que le decían, ni estaba su cabeza para cosas de religión.
  • Sí, señor, a pesar de estos colores y de esta carne, como dice don Robustiano, estoy enferma.
  • Mientras el belicoso médico no venía, todo era paz y sosiego en la habitación de la enferma.
  • No le molestaba andar con un chico sucio en brazos o cuidar de una vieja enferma de la guardilla.
  • Tuvo pesadillas, y aunque hizo esfuerzos para no declararse enferma, el mal pudo más, la rindió.
  • ¡Ay, qué mala he sido! exclamó la enferma, también sin efusión, como quien cumple un trámite.
  • Yo tengo verdadero odio a esa gente sin conciencia, que llena de carne enferma y podrida la tierra.
  • Estaba aquella noche la enferma sumamente inquieta, y lo poco que hablaba no era un modelo de claridad.
  • Al entrar el médico, la enferma solía bajar disimuladamente al gato de la cama y dejarlo en el suelo.
  • Frígilis encogió los hombros y tomó el pulso a la enferma, que le apretó la mano, perdonándoselo todo.
  • Había estado todo el día y la noche anterior en casa de Candelaria que tenía enferma a la niña pequeña.
  • La fiera debía estar enferma, porque la domadora no halló medio de que hiciese los ejercicios de costumbre.
  • Lo que es el dinero no lo tomo declaró la enferma del corazón, alargando los labios como los niños mimosos.
  • Después de vaciarse el líquido, Andrés pudo sondar la vejiga, y la enferma comenzó a respirar fácilmente.
  • Adornaron el cuarto de la enferma de blanco, lo cubrieron de sobrecamas y trajeron flores y estampas religiosas.
  • Mientras duró el temor de la gravedad, el amante esposo no pensó más que en la enferma y cumplió como bueno.
  • Cuando el sacerdote se aproximaba, la santa susurró al oído de la enferma, como secreto de ángeles, estas palabras.
  • Nones habló cariñosamente a la enferma, que le miraba con empañados ojos, sin dar ninguna respuesta a sus palabras.
  • Los nervios se le pusieron tan alborotados y el corazón tan oprimido, que sus suegros y su marido la creyeron enferma.
  • El matrimonio y la mamá de él, enferma, y una hermanita que, según me ha contado Ponce, debe de tener hambre canina.
  • Doña Lupe y Fortunata entraron, precedidas de Severiana, en el aposento de la enferma, que estaba incorporada en la cama.
  • Y ciega por el llanto, las manos juntas temblando sobre la cabeza, balbuciente, exclamó con voz de niña enferma y amorosa.
  • Y luego se sentaba la tía Tula junto a la cama de la enferma y se estaba allí, y ésta no hacía sino mirarle en silencio.
  • En aquel mundo de flaquezas, de escándalos, ¿quién recordaba ya la aventura, poco conocida al cabo, de la sobrinilla enferma?
  • Y cerca de Ana nerviosa, aprensiva, febril, semejaba el símbolo de la salud queriendo contagiar con sus emanaciones a la enferma.
  • Don Víctor con las manos cruzadas, apretadas, convulso, preguntaba estas cosas delante de la enferma, que aunque aletargada, oía.
  • Callose un instante, y después de los dos o tres suspiros que Fortunata echó de su seno, volvió a hablar la enferma de este modo.
  • En la casa creían postrada o dormida a la Regenta y no abrían las maderas del balcón, ni interrumpían el descanso de la enferma.
  • A la hora de comer, Maximiliano habló del caso, describiendo la cura y haciendo augurios poco lisonjeros sobre la suerte de la enferma.
  • La enferma seguía la caza con la mirada, y cuando vió que cogían a su gato, dos lágrimas gruesas corrieron por sus mejillas pálidas.
  • La enferma se inclinó hacia ella, y dándose unos aires evangélicos, en el tono que podría emplear un pastor de almas, le amonestó así.
  • Miró la lengua a la enferma, le tomó el pulso, le mandó aplicar al sobaco un termómetro que sacó él del bolsillo, y contó los grados.
  • Entonces estaba enferma, la lectura de Santa Teresa, la debilidad, la tristeza, le habían encendido el alma con visiones de pura idealidad.
  • Quería sustraerse a las manifestaciones de gratitud de la pobre enferma, y evitarle a esta el sonrojo de su desairada situación como madre.
  • Se necesita mucho corazón para cargar con una mujer sin otra renta que la aguja y que lleva tras sí el bagaje de una amiga vieja y enferma.
  • En el caso aquél no era la venta corriente, sino la de una res estropeada y enferma, y había que dar mucho dinero encima para sacarla de casa.
  • Catalina, llorando, contó que su madre estaba muy enferma, su hermano se había ido con los carlistas y a ella querían meterla en un convento.
  • A pesar de la prohibición de don Víctor, vino el retroceso, recayó la enferma, y se volvió a los sustos, a los apuros, a las noches en vela.
  • Estas logomaquias de la voz interior, para la enferma eran claras, porque no hablaba así en sus adentros sino en vista de lo que experimentaba.
  • Andrés animó un poco a la enferma, jabonó y friccionó la piel en el sitio de elección, y hundió el trócar en el vientre abultado de la muchacha.
  • Tenía un ídolo y era feliz entre sobresaltos nerviosos, punzadas de la carne enferma, miserias del barro humano de que, por su desgracia, estaba hecha.
  • El primer día que Julián pudo ver a la enferma, no hacía muchos que se levantaba, para tenderse, envuelta en mantas y abrigos, sobre vetusto y ancho canapé.
  • Salieron corriendo su mujer, enferma, y las cuatro hijas, gritando como locas, y se abrazaron á él, intentando arrancarle la escopeta, tirando del cañón con ambas manos.
  • Pero de repente me trastorné, y caí tan enferma del estómago, que no podía pasar nada, y lo mismo era entrarme bocado en él o gota de agua, que parecía que me encendían lumbre.
  • Y en esto, mientras soñaba así y como para guardar en su pecho este último ensueño y llevarlo como viático al seno de la madre tierra, la pobre Manolita cayó gravemente enferma.
  • Con baja y enferma voz e inclinadas mis manos en los senos, puesto Dios ante mis ojos y la lengua en su nombre, comienzo a pedir pan por las puertas y casas más grandes que me parecía.
  • No quería volver a las andadas, temía que viniesen la compasión y los remordimientos y las aprensiones a molestarla y al fin hacerla caer enferma, si por completo rompía con el Provisor.