Palabras

Ejemplos de oraciones con la palabra espléndida

Lista de frases en las cuales se puede ver cómo se usa la palabra espléndida en el contexto de una oración.

Término espléndida: Frases

Si quieres ver ejemplos de uso de la palabra "espléndida" aquí tienes una selección de 19 frases y oraciones donde se puede ver su aplicación en un texto.

En cada una de las frases aparece resaltada la palabra espléndida para que la puedas detectar fácilmente.

Para evitar saturar nuestro sistema sólo se mostrarán un máximo de 100 frases por palabra.

  • Será una cosa espléndida.
  • Doña Hortensia estaba espléndida.
  • Debía ser espléndida, sin miedo al gasto.
  • Era una mujer, pero una mujer espléndida, hermosísima.
  • Al contemplar esta decoración espléndida, me preguntaba.
  • Y le acariciaba lentamente la espléndida cabellera rubia.
  • Sarrió tiene una mujer gruesa y tres hijas esbeltas, pálidas, de cabellera espléndida.
  • Y ¿por qué había de preferir la mesa de los marqueses a la de Páez, no menos espléndida?
  • Mayo se despide con una espléndida noche dijo Ana, apoyándose con fuerza en el brazo de su marido.
  • Segundo, para que la maternidad desgastase un poco aquella hermosura espléndida que cada día deslumbraba más.
  • Un año hizo una espléndida novena a San Francisco, a la cual acudió toda Vetusta edificada, como decía Bermúdez.
  • Los pueblecitos marinos desfilaban a la izquierda de la vía, colocados entre el mar azul y una vegetación espléndida.
  • Esta la hacía a veces tan espléndida y tal alta, que cuando caía de ella a la del pan, estaba todo molido y maltrecho.
  • De día, el mar estuvo como una llanura inmóvil de cristal fundido por el sol, y la noche fué espléndida, cuajada de estrellas refulgentes.
  • En todas las fechas que recuerdan algo dichoso para la familia, se hacen recíprocamente sus regalitos, y para colmo de felicidad, ambos disfrutan de una salud espléndida.
  • Por cierto que las alhajas le habían gustado mucho a doña Lupe por lo ricas y elegantes, y del abrigo de terciopelo dijo que con ligeras reformas sería una pieza espléndida.
  • Con la respiración rítmica de un buen monstruo dormido, el agua, soñolienta, reflejaba la costa con todos sus detalles en la claridad de aquella tarde perezosa y espléndida.
  • Era la hermosura espléndida y algún tanto provocativa de Rosa, flor de carne que se abría a flor del cielo a toda luz y todo viento, la que llevaba de primera vez las miradas a la pareja.
  • ¡Un vagabundo, un ladrón, se la había jugado a él, a un hidalgo rico heredero de una casa solariega! Y lo que era peor, ¡esto no sería más que el principio, el comienzo de su carrera espléndida! Carlos, mortificado por sus pensamientos, no prestó atención a lo que hablaban.