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Ejemplos de oraciones con la palabra mandado

Lista de frases en las cuales se puede ver cómo se usa la palabra mandado en el contexto de una oración.

Término mandado: Frases

Si quieres ver ejemplos de uso de la palabra "mandado" aquí tienes una selección de 52 frases y oraciones donde se puede ver su aplicación en un texto.

En cada una de las frases aparece resaltada la palabra mandado para que la puedas detectar fácilmente.

Para evitar saturar nuestro sistema sólo se mostrarán un máximo de 100 frases por palabra.

  • Lo ha mandado el médico.
  • E | MANDADO POR NELSON |Bucentauro.
  • No comprende que no se la ha mandado.
  • Le he mandado que venga y no quiere venir.
  • E | MANDADO POR COLLINGWOOD | Indomptable.
  • Me lo han mandado de León lleno de nueces.
  • A algunos se les amortajó como está mandado.
  • El que le ha mandado a usted esto no es un amigo.
  • Le he mandado que se trasquilase esta misma tarde.
  • Él sabrá por qué ha mandado acá este angelote.
  • Si el almirante Córdova hubiera mandado virar por.
  • El San Justo, de 76, mandado por Don Miguel Gastón.
  • El San Leandro, de 74, mandado por Don José Quevedo.
  • El San Francisco, de 74, mandado por Don Luis Flores.
  • Lo menos habré mandado al otro mundo dos docenas de ingleses.
  • Más valdría que sus padres lo hubiesen mandado a la escuela.
  • Y además un hospital, y además ha mandado construir una iglesia.
  • Dime, ¿por qué no te has puesto la bata de seda, como te he mandado?
  • He sabido como habías venido a Logroño y he mandado que te buscaran.
  • El otro traía a su frente el Royal Sovereign, mandado por Collingwood.
  • Quintanar debe de haber mandado a estas horas sus padrinos a don Álvaro.
  • Yo he seguido interrogando a las pupilas y he mandado al hospital a cuatro.
  • La credencial estaba allí, y no me la habían mandado por no saber mis señas.
  • Ya he mandado a Primitivo que ensille la yegua y ponga el aparejo a la borrica.
  • Iba preparada a ocultar la visita del Magistral sin que nadie se lo hubiera mandado.
  • Tres veces se había mandado aviso a casa del Magistral para que viniera en seguida.
  • En esto llegó el Padre Nones, a quien Guillermina había mandado llamar para que la auxiliase.
  • Se sacó la caja y se la colocó en el coche que habían mandado de San Juan del Pie del Puerto.
  • Ha mandado poner el cuarto de Nebot en el mejor sitio de la casa, cerca de la alcoba de su mujer.
  • ¡Qué pesado está Don Federico! decía observando el Príncipe de Asturias, mandado por Gravina.
  • Él, si los mata, peca menos que usted, por haberle mandado que lo hiciera, acalorándole con promesas.
  • ¿Pero quién, pero quién es el demonio del Infierno que ha mandado vayan a bordo los oficiales de tierra?
  • Cuando la criminal entró, el marido había mandado encender luz y estaba sentado junto a la mesa de la sala.
  • Efectivamente, al acercanos, todos reconocieron al Santa Ana, mandado en el combate por el teniente general Álava.
  • Se trataba de alguna poesía o cuento fantástico que había mandado a cualquier periódico y que no acababa de salir.
  • Por este motivo ha mandado pregonar que los labradores que quieran venir a romper y beneficiar sus dehesas pueden venir tranquilamente.
  • Imitaba a quien Perales la había mandado imitar, pero en algunas ocasiones se atrevía a ser original y hacía excelentes papeles de virgen amante.
  • También él abreviaba el rezar y la mitad de la oración no acababa, porque me tenía mandado que en yéndose el que la mandaba rezar, le tirase por el cabo del capuz.
  • El doctor había mandado que se le diera doble dosis de la nuez cómica, seguir con las cucharadas por la noche, las papeletitas por el día, y a sus horas el Jerez o Pajarete.
  • Según allí me dijeron, además del Trinidad, se habían ido a pique el Argonauta, de 92, mandado por Don Antonio Pareja, y el San Agustín, de 80, mandado por Don Felipe Cajigal.
  • Hay que tener en cuenta dijo mi amo con placer, viendo mencionado su tema favorito, que si el almirante Córdova hubiera mandado virar a babor a los navíos San José y Mejicano, el Sr.
  • Si el almirante Córdova hubiera mandado orzar sobre babor a los navíos de la vanguardia, según lo que pedían las más vulgares leyes de la estrategia, la victoria hubiera sido nuestra.
  • Y si no estuviera mandado que lo cómico no acabe en trágico, en buena retórica, en aquel montón inquieto hubieran encontrado sepultura Álvaro y Ramona sofocados por uno de nuestros más humildes cereales.
  • Al punto comprendí que se había mandado detener la marcha del Trinidad para estrecharle contra el Bucentauro, que venía detrás, porque el Victory parecía venir dispuesto a cortar la línea por entre los dos navíos.
  • Tal es su timidez, y el miedo que tiene a los ingleses, que al entrar aquí la escuadra combinada en Agosto último no se atrevió a apresar el crucero inglés mandado por Collingwood, y que sólo constaba de tres navíos.
  • Al ver al pobre muchacho solo y gesticulando como un imbécil, había llamado a la niña para que lo llevara abajo con la gente joven, lo mismo que dos meses antes le había mandado que rompiese con él toda clase de relaciones.
  • Pero los dos últimos se perdieron en la costa, lo mismo que el Monarca, de 74, mandado por Argumosa, y el Neptuno, de 80, cuyo heroico comandante, Don Cayetano Valdés, ya célebre por la jornada del 14, estuvo a punto de perecer.
  • Los antiguos cuadros de la escuela de Cenceño sin duda, pero al fin venerables como recuerdos de familia, los había mandado al segundo piso, y en su lugar puso alegres acuarelas, mucho torero y mucha manola y algún fraile pícaro.
  • Y sacaba a relucir la historia de tal brigadier que si, conforme no mandó, hubiera mandado la acción de tal parte, hubiera conquistado la gloria de un Napoleón, en vez de perder las posiciones, como en efecto las había perdido el general inepto.
  • Que si Córdova, comandante de nuestra escuadra, hubiera mandado orzar a babor en vez de ordenar la maniobra a estribor, los navíos Mejicano, San José, San Nicolás y San Isidro no habrían caído en poder de los ingleses, y el almirante inglés Jerwis habría sido derrotado.
  • Aquellos ocho años de juventud sin amor, sin fuego de pasión alguna, sin más atractivo que tentaciones efímeras, rechazadas al aparecer, creía que no hubiera podido sufrirlos a no pensar que Dios se los había mandado para probar el temple de su alma y tener en qué fundar la predilección con que la miraba.
  • Durante el paseo, mi amo, después de haber asegurado con su habitual aplomo que si el almirante Córdova, en vez de mandar virar a estribor hubiera mandado virar a babor, la batalla del 14 no se habría perdido, entabló la conversación sobre el famoso proyecto, y aunque no dijeron claramente su propósito, sin duda por estar yo delante, comprendí por algunas palabras sueltas que trataban de ponerlo en ejecución a cencerros tapados, marchándose de la casa lindamente una mañana, sin que mi ama lo advirtiese.