Palabras

Ejemplos de oraciones con la palabra volando

Lista de frases en las cuales se puede ver cómo se usa la palabra volando en el contexto de una oración.

Término volando: Frases

Si quieres ver ejemplos de uso de la palabra "volando" aquí tienes una selección de 16 frases y oraciones donde se puede ver su aplicación en un texto.

En cada una de las frases aparece resaltada la palabra volando para que la puedas detectar fácilmente.

Para evitar saturar nuestro sistema sólo se mostrarán un máximo de 100 frases por palabra.

  • Espera, Nuchiña, vengo volando.
  • He venido volando por no hacerme esperar.
  • Iba volando por el azul que veía allá arriba.
  • Cuatro o seis palomas blancas cruzan volando lentamente.
  • El barco se inclinó de costado y comenzó a deslizarse volando.
  • Volando no, pero sí al cabo de media hora, volvió sin aliento.
  • Doña Lupe furiosa, el pobre Rubín ido, y esta paloma volando al tejado del vecino.
  • Y no podréis ir a salvar al compañero volando sobre el ras del albañal porque no tenemos alas.
  • Y con los ojos abiertos al milagro, vio un pájaro obscuro salir volando de un matorral y pasar sobre su frente.
  • El amor sacrílego iba y venía volando invisible por naves y capillas como una mariposa que la primavera manda desde el campo al pueblo para anunciar la alegría nueva.
  • A veces esta brusca revuelta dependía de una palabra, de una idea caprichosa que pasaba volando por su espíritu, como pasa un pájaro fugaz por la inmensidad del Cielo.
  • A lo lejos gritaban las agoreras aves de invierno, que después aparecían bajo las nubes, volando fuera de tiro, sin miedo al cazador, pero tristes, cansadas de la vida, suponía Quintanar.
  • Y todo aquello había sido movimiento, luz, vida, ruido, cantando en el bosque, volando por el cielo azul, serpeando por las frescas linfas, luciendo al sol destellos de todo el iris, al pender de las ramas, en vega, prados, ríos, montes.
  • Se devanaba los sesos en el torniquete de su desvelo para averiguar el sentido de tal fenómeno, y llegó a figurarse que de los restos fríos de Mauricia salía volando una mariposita, la cual mariposita se metía dentro de la rata eclesiástica y la transformaba.
  • Le arrastraba con sobrehumana ligereza, lo llevaba volando ó nadando no lo sabía él con certeza, á través de un elemento ligero y resbaladizo, y así iban los dos vertiginosamente, deslizándose en la sombra, hacia una mancha roja que se marcaba lejos, muy lejos.
  • Agradábale más vagar solo que en compañía de Olmedo, porque este le distraía, y el goce de Maximiliano consistía en pensar e imaginar libremente y a sus anchas, figurándose realidades y volando sin tropiezo por los espacios de lo posible, aunque fuera improbable.